una pena fronteriza, una cara de tristeza hombros caídos, mirada perdida oidos nihilistas y una boca destructiva dientes amarillos por la aniquilante nicotina
puede oir los latidos de su corazón donde seacuando sea, como sea que se escuchen...
(...)
si es que de pueden escuchar
una oscura melodía penetra en sus oídos
melodía necrofílica
un rítmico y mortuorio lamento
muchas gracias por la visita
y mas aun
por el comentario
me ha alegrado una pisteada.